Ya estamos en plenas fiestas de Guaso. Todos los visitantes son bienvenidos....¿¿¿¿todos...........??????.
Ayer se celebro la tradicional ronda , y este año nos tocaba en casa.
Como siempre la recibimos con ilusión, sobre todo por los músicos y los amigos que nunca faltan.
Pero viene más gente.....mucha más gente .
Cual no sería nuestra sorpresa, cuando al marchar la gente del jardín, vimos vasos tirados por la hierba como si de un botellón urbano se tratase.
Pero no queda aqui la cosa........
Del pedriño pegado a casa....¡¡¡¡¡¡nos desapareció una maceta con flores, de mas de diez kilos!!!!!
Desde lugo estamos convencidos que ha sido la excepción........pero da mucha rabia que abras tu casa a la gente para que se te lleven las cosas.
Una pena.
Cuando toque la proxima vez, ya veremos si se nos ha olvidado.
Saludos indignados. Kike y Dori.
Hola Quique, aquí te mando un pequeño romance que tengo intención de leer en la próxima máquina de escribir que grabaremos esta semana. Cuando me lea las rutas de treeking de mula te diré algo. Un abrazo y besos a Dori.
ResponderEliminarLA MACETA
Era el día en que la Ronda
una vez más desgranaba
su expléndido repertorio
por Guaso, de casa en casa.
En el calor de la tarde
agolpándose a la entrada
un gentío como nunca
consume presto las viandas
que tan generosamente
cada vecino les saca.
En casa de unos amigos
les ofrecen el jardín
para que bailen a gusto
y se puedan divertir.
Reparten viandas y vino
de forma más que gentil.
Todo trancurre entre risas
hasta después de salir
cuando ya se han ido todos
y el botellón da a su fin.
Lo peor no son lo vasos
tirados sobre la hierba
que pueden hacer pensar
que ha pasado una caterva
de esas que en nocturnidad
les da igual ocho que ochenta
sino que de un gran pretil
se han llevado una maceta
sacándola como cacos
que han perdido la verguenza
como si fuera un trofeo
que se ganan por su jeta.
Chorizo de poca monta
al que todo se la pela
a expléndidos anfitriones
da puñalada trapera
cuando se lleva las flores
que cada mañana riegan
y que van a echar de menos
por el vacío que dejan
y sobre todo, sin duda,
porque no cabe en cabeza
que alguien pueda ser tan ruin
cuando su casa le dejan.
Si el o la « robamacetas »
este romance me escucha
podría anónimamente
enmendar algo este caso
dejando sin que se enteren
otras flores de regalo
y una nota de disculpa
a manera de descargo.
Como eso no ocurrirá
hemos de reflexionar
si deseamos un mundo
abierto de par en par
donde seamos sensibles
a apreciar lo que nos dan
y devolver gratitud
a quien nos abre su hogar
y no unos viles capullos
que obliguen a desconfiar
a quien siempre abre su casa
cuando se viene a rondar.
Buen romance. Al final habra valido la pena. Un abrazo. kike.
ResponderEliminarYo también estuve en Guaso y efectivamente no fué como otros años. Hubo exceso de gente. No quiero señalar a nadie pero se cual fué el problema. Vino un autocar lleno con jóvenes,unos 50, procedentes de Griebal. Estaban allí haciendo trabajos de campo, que es muy meritorio, para recuperar el lugar. Eran chavales estupendos, peros ellos iban allí con ganas de juerga, de beber, comer y todo lo que es normal a esa edad. Les faltaba el sentimiento rondador. Por eso este año no fue como los anteriores. Hubo excesiva gente y por eso en muchos lugares no pudimos siquiera acercarnos a escuchar y cantar con la Ronda, Beber un refresco, hacía muchísimo calor, fue imposible en muchas de las amables casas del lugar. En fin, ¡otro año será mejor!.
ResponderEliminarLorizar, estoy de acuerdo en que los jovenes tengan ganas de juerga, pero eso no tiene nada que ver con la educación. Yo tambien he ido de juerga, y mucho, y nunca se me ha ocurrido tirar un vaso en ningun sitio, y menos en casa de alguien.Saludos.
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