Por suerte, aun quedan personas que mantienen los antiguos oficios del pasado.
Hay herradores buenos y también malos,
que se creen que tienen que dominar al animal para que les deje trabajar,
Oscar, el herrador del video , es todo lo contrario, todo cariño y paciencia. Como siempre debería ser.
El olor a "cuerno quemado", trae recuerdos de un tiempo en el que esto era más normal que oler a neumáticos cuando cambias las ruedas.
Saludos. Kike.
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